Undécima fecha

Vení, vení, entrá conmigo.
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Sportsman 6 - 1 A. Chimpay
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Antes que nada, les pedimos disculpas, porque se nos lesionó el enviado especial (?), y por eso estamos flojos en el relato de los partidos.

De todas maneras, en esta ocasión el relato del encuentro es lo de menos.

Lo importante de verdad, es que el Rojo está nuevamente en las semifinales de la Liga Avellaneda.

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Como les adelantábamos, perdía el Rojo 1 a 0 antes del primer cuarto de hora. Pero, la diferencia de jerarquía que se viene notando entre estos dos equipos desde hace unos años, inclinó la balanza para nosotros.
Se hizo esperar, pero el "nene" Silisqui lo empató a los `40 PT y una vez que se abre el arco, parece que entran más fácil. Apenas comenzado el segundo, el "piojo" Colguán a los `4 desnivelaba a favor del Rojo. Y Si a chimpay le quedaban ganas de levantarse, las maltrataron de muerte
Silisqui a los `14 y el "topo" Laurín a los `20, que convertían el triunfo en goleada.
Como regalo para la hinchada Roja, y demostrando que el equipo está nuevamente con la cabeza puesta en el torneo, y se afianza, el eterno "chuby" Isasmendi (gracias por estar siempre!!!) atajó un penal a los `40 ST. El "ñoqui" Franco Giretti y el "verdugo" Rudy Muñoz completaron la media docena.
El Rojo está otra vez en semifinales y en levantada. Terminó tercero en la rueda, con 21 pts., 2 menos que Alumni (tuvo fecha libre), uno menos que Puente (que le ganó a Villa), y arriba por diferencia de goles sobre el Deportivo "Enbidia se escribe con b de beltrán" (empató 1 a 1 con Lamarque), que entró último.
Un dato a tener en cuenta: los tres equipos que jugarán las semis junto a Sportsman, le ganaron sus desafíos en la temporada regular. PERO!
En etapa de definiciones, todos arrancan de cero.
Al Rojo (como bien dijo nuestro primer comentarista) le toca con Puente Molina.
Beltrán y Alumni serán los otros dos aspirantes a un lugar en la final. Todos rivales de nivel. La ilusión de ver buenos partidos está intacta.
Y no olviden que al Rojo le gusta jugar a cancha llena.
Así que purrete, niño de corazón, joven travieso que mira por debajo de las polleras y bebe refrescos de campéon, te digo una vez más (y sabés que no me la podés caretear): "te veo en la cancha, chabón".
No sé vos, pero yo voy a estar. Y te redoblo la apuesta, papá: lo voy a llevar a mi viejo!
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Entiendo tus gafas oscuras.
La envidia te daña los ojos.
LA970. Siempre.