Poné primera, papá

Se fue la primera semi, y el Rojo se trajo un empate valioso de la cancha de beltrán.

La liga Avellaneda llegó a instancias decisivas, con miras a definir "quién manda en la zona", pero mucho más importante, quién nos acompañará en el Torneo del Interior 2010. En la cancha de Almafuerte, el local (4to clasificado) y Puente Molina (1er clasificado) empataron 1 a 1 en un partido que comenzaron ganando los verdes de Choele, y que el "Tata" emparejó y hasta mereció ganar, llegando recién cerca del final, al 1 a 1 con el que cerró el cotejo de ida. Puente Molina tiene, lo mismo que Sportsman, ventaja deportiva para llegar a la final.

En el pueblo del salitre, el resultado fue idéntico: (un mentiroso) 1 a 1.

El viento patagónico se adueñó de la semana entera en el Valle Medio, y el domingo sopló con furia. En el descampado terreno en el que se asienta la cancha de beltrán, se adueñó de la pelota, que siguió gran parte del tiempo su caprichoso mandato.

No obstante, cuando la primera salió al verde, la Naturaleza dejó espacio al hombre.

Y el hombre vestía de Rojo: Riviere, Yunes, Díaz, Filippi y Rodríguez, los cuatro del fondo; Suazo, Oyarzo (de 5), Laurín y Freidoz apenas adelantado, Alarcón y Muñoz en la ofensiva.

Y de Rojo se tinó la tribuna visitante, poblada por más de 200 hinchas que hicieron el sacrificio de llegarse hasta la vecina localidad.

El resultado, justo es decirlo, fue casi casi injusto. Porque el Rojo, a pesar de jugar 70 minutos con un hombre menos, tuvo más chances de gol. Es verdad que el partido no fue bueno, pero antes de los 10´ del PT, Sportsman ya se ponía en ventaja con un golazo del "Topo" Cristian Laurín, que tomó una pelota en el vértice derecho del área salitre, y desplazándose pelota atada hacia el centro de la misma clavó un certero zurdazo en el ángulo derecho del arquero Elosegui, que todavía se estaba acomodando para la foto de equipo.

Delirio de la banda roja, que pensaba en goleada. Y así parecía que iba a terminar el cuento... Dos tiros en el travesaño se destacan entre las jugadas más peligrosas que no se pudieron concretar. Pero antes de los 20´, el destino (cambiante como el viento) pareció jugarle una mala pasada al 11 choelense: una aparente mano en el área de Sportsman le dio la chance a beltrán de igualar a través de un tiro penal que tomó Peguenche y lo cambió por gol; enseguida, y sin posibilidades de reaccionar, otra jugada dudosa sacó de la cancha al santiagueño Díaz (se habla de codazo, pero también de insultos al juez de línea), y a remarla con 10.

Rochetti no hizo cambios, y pasó a defender con 3 hombres. Riviere, manso y tranquilo. El resto, acomodándose. Yunes casi desequilibra con un cabezazo que se va apenas por arriba.

En el ST, la diferencia de un hombre no se notó en absoluto. Es más, el DT hizo cambios de nombres, pero no de estrategia. Porque Silisqui reemplazó a Muñoz (que esta vez no pudo concretar), y Giretti entró luego por Alarcón.

Por momentos, el visitante dominaba el juego y el local jugaba de contragolpe. La noche y el frío llegaron, y con ellos dos lesiones: la del árbitro Leiva primero (se jugaron 15´ sin un línea) y la del "por todos conocido" negro Scordo. Ya no parecía haber lugar para emociones, pero en un avance casi letal, Freidoz recibe el balón desde la izquierda y se encuentra frente al arco, a unos 25 metros y con un defensor enfrente: tenía dos chances: dejarsela a Silisqui más a la izquierda o patear al arco (ya que el defensor había adivinado la intención de pase). Optó por el pase, y el "nene" Silisqui ensayó un remate cruzado a ras de piso que le dio un pico al palo izquierdo y salvó a beltrán de la vergüenza y a Sportsman de la lluvia de piedras.

Fue 1 a 1. Pero casi casi injusto. Gracias a dios, el fútbol da revancha. Siempre. Y la 970 espera,

tranquila, el domingo, para llenar otra vez la san martín y tello en el la última recta del camino a otra final.

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La 4ta, por su parte, cayó por un duro 4 a 2.
El clima no ayudó, y el equipo no tuvo muchas ideas. Pero con un poco más de concentración y un poco menos de nervios, acompañará a la 1era a la final.